El Puente de Palmas es el más antiguo de la ciudad. Está documentada su existencia ya en la segunda mitad del siglo XV, sin que exista constancia de puentes más antiguos. La investigación todavía no ha explicado satisfactoriamente la ausencia de estructuras para cruzar el río Guadiana en los más de seis siglos de existencia previa de la ciudad.
Su aspecto actual, con treinta y dos ojos y más de seiscientos metros de longitud, es el resultado de muchas reconstrucciones (la última en el siglo XIX), necesarias porque las avenidas del río, relativamente frecuentes antes de su regulación en el siglo pasado, destruyeron en varias ocasiones la estructura. Consta que esto ocurrió al menos en 1545, 1603, 1828 y 1876. Algunas de éstas, y su posterior reconstrucción, están documentadas por inscripciones.
En más de un sentido el puente fue un icono representativo de la ciudad, además del punto de entrada en España desde el vecino reino de Portugal. De ahí que tenga una importante carga de simbolismo político. Por ello, en su lado norte estaba defendido por un hornabeque, mientras que por el lado urbano está rematado por un arco de triunfo, la conocida como Puerta de Palmas, que exhibe un escudo del emperador Carlos V e inscripción dedicatoria del entonces Príncipe, luego rey Felipe II, fechada en 1551.
En este mismo sentido de simbolismo político debemos interpretar los conjuntos heráldicos colocados originalmente en el puente (no se sabe exactamente dónde y cómo), retirados en el siglo XIX y actualmente conservados en este Museo.
El primero corresponde al año 1596, y documenta la reconstrucción del puente por el corregidor Diego Hurtado de Mendoza durante el reinado de Felipe II. Es necesario señalar que para esta fecha ya era también rey de Portugal.
El emblema de Badajoz (expuesto en la sala de Medieval Cristiano del Museo) y el del corregidor flanquean el escudo del rey. La inscripción se ha perdido y se conoce por una transcripción de Tomás Romero de Castilla. La corona real fue destruida durante la Revolución de l868 (la Gloriosa).
El segundo conjunto data de 1612, y documenta otra reconstrucción del puente, en este caso a cargo de Fernando Ruiz de Alarcón, en época de Felipe III (Segundo de Portugal). El esquema es similar al del conjunto anterior. La inscripción dice (se moderniza la transcripción):
Reedificó esta puente desde 6 días de Iulio de 1609 años / por mandado de Su Magestad siendo Corregidor desta ciudad / I Juez de Comisión para ello Don Fernando Ruiz de Alarcón caballero del Ábito de San/tiago i señor de las billas de Santa María del Campo i Pobeda i en su ti/empo sacó todos los cimientos de ella i hiço trece pilares y seis arcos i otras / cosas hasta 6 de Iunio de 1612 años que dejó la bara.
Una última inscripción documenta una reconstrucción del puente en 1709. La inscripción dice (se moderniza la transcripción):Esta puente se hizo a costa / de esta Muy Noble y Leal Ciudad de Badajoz siendo / Correjidor el (señor) Don Joseph de / La Rocha Calderón, Rexidor / perpetuo della y Alcalde (de) la Santa Hermandad por el Estado Noble año de 1709
Es posible, vista la fecha, que esta reconstrucción fuese necesaria para reparar los daños sufridos en la estructura por causa de los bombardeos de los sitiadores portugueses durante la Guerra de Sucesión Española.
PUBLICADO EN
González Rodríguez, Alberto: Puerta de Palmas y el Puente viejo (1460 - 1994), Caja Rural de Extremadura, Badajoz, 1995 (Segunda edición: Badajoz cara a Guadiana. La Puerta y el Puente de Palmas 1332-2018, Fundación CB, Badajoz 2019)
Romero de Castilla, Tomás: Inventario de los objetos recogidos en el Museo Arqueológico de la Comisión Provincial de Monumentos de Badajoz, Badajoz, tipografía El Progreso, 1896
Kurtz Schaefer, Guillermo; Domínguez de la Concha, Coronada (1996): "Epigrafía medieval y moderna del Museo Arqueológico Provincial de Badajoz", en Revista de Estudios Extremeños, tomo LII-2, p. 498-501, y 524-525
REFERENCIAS EXTERNAS